Nos asomamos a esta ventana desde diferentes regiones de habla hispana para compartir nuestros microrrrelatos y cuentos. A nuestro universo de letras impacientes, en rompecabezas de historias creadas en geografías y culturas distintas, los une la misma emoción, el mismo deseo de llegar a los lectores de este cosmos que traspone todas las vallas de tiempo y espacio. Los invitamos a seguirnos y a expresar sus sugerencias ¡Bienvenidos!
domingo, 18 de julio de 2021
Medianera
Damián Viloria
Cordoba, Argentina
Le preguntaron a una flor cómo se sentía en aquel jardín: bien, dijo, las demás flores son bastante discretas, el pasto es verde, un enano de cerámica ofrece cierta compañía y el viento mueve, desde abajo, nuestras flacas siluetas. La señora nos corta alguna que otra vez las hojas muertas y no deja faltar el agua. Lo insoportable, eso sí, es el ojo de la vecina. Se posa, con el sol de la mañana, sobre los últimos ladrillos del paredón. Va insinuando la mano. Y vierte, en un leve y repentino gesto de furia, de nuestro lado, el frasco con hormigas. Los gorriones, que todo lo ven, nos contaron: se pasa el día juntando sus hormigas, para, después, abandonarlas. Pero la señora, aunque no diga nada, lo sabe; como buena vecina, las recoge y las devuelve. Pobres hormigas, qué habrán hecho.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
¡Muy original el texto! ¡Me encantó!
ResponderBorrarMuchas gracias Osvaldo. Fue escrito de madrugada en el baño de la terapia intensiva del hospital San Antonio de Padua de la ciudad de Río Cuarto, Córdoba, Argentina. Soy enfermero y la única manera que encontré de escapar del drama es esta: escribir.
ResponderBorrarGran oficio Damián y una creativa forma de hacer frente al drama que nos aqueja.
BorrarMe alegro mucho Damián que te sumara a este espacio!
ResponderBorrar