Belisario Oliva Sosa
Perú
SOPA DE SETAS
Morgana, una guapa inglesa parada
frente a la puerta principal del castillo del duque de Windsor, golpea por
quinta vez el portón de madera. Su rubia cabellera ondea con la cálida brisa
que envuelve al castillo. No viste como una pueblerina, sino más bien como una
joven de buena posición económica; aparenta tener unos 25 años.
Finalmente, el jefe de guardia decide
atender a Morgana.
––He venido por invitación de don
Charles, el chef del palacio, para trabajar en la cocina.
El jefe de guardia contrariado por la
respuesta de la joven, ingresa al palacio en busca de don Charles. Le llama la
atención el rostro de felicidad de éste al enterarse de la llegada a palacio de
Morgana y que le ruege que de inmediato la haga pasar y la guíe hasta la
cocina.
Morgana es recibida con un abrazo por
don Charles, quien no disimula su alegría de tenerla en palacio. Luego de
presentarla a los demás miembros de la cocina le dice:
––Dame unos minutos para preparar tu
dormitorio, como te lo mereces. Después de tan largo viaje debes estar agotada
y necesitas descansar. Al mismo tiempo pongo en conocimiento del duque tu llegada. No creo que
haga ningún reparo para tu contratación como cocinera de palacio, más aun, con
las grandes cartas de recomendación que estas presentando, y especialmente las
de tu labor en la corte real francesa.
Y así sucedió, le dieron el visto
bueno para que Morgana laborase en la cocina, y el duque anunció a su chef que
uno de estos días pasaría por la cocina para conocerla y saludarla. Deferencia
que no acostumbra tener, pero dado las excelentes cartas de recomendación
presentadas, haría una excepción. Pasados tres días él decide conocer a su
nueva cocinera. Queda muy impresionado de su hermosura y a la vez intrigado
porque una chica de finos modales y buen vestir prefiera trabajar en la cocina.
Morgana no tarda mucho en granjearse
el aprecio y simpatía de no solo los miembros de la cocina, sino también de
algunos integrantes de la corte que la conocen por su buen trato y belleza
angelical. Abundan los términos elogiosos de los miembros del palacio. Desde la
llegada de Morgana la variedad de la comida ha mejorado considerablemente. Se
combinan platos de la escuela francesa e italiana con la china e inglesa con
una exquisitez en la sazón.
En época de invierno, la sopa de
setas es el plato estrella de Morgana. Ella misma escoge los hongos en los
bosques, en las afueras del palacio. Nunca delega en otra persona esta tarea,
pues considera muy peligroso confundirlas con las setas venenosas. Según los
comentarios de los lugareños, Morgana suele conversar animadamente con un
Centauro, el cuidador mágico del bosque donde recoge las setas.
El reino de Arcador, que se encuentra
al noroeste de las tierras del duque de Windsor, se destaca porque su reina
Ariana, de una belleza sin par, ha llegado al poder usurpando el derecho de sus
familiares, utilizando poderes mágicos.
El duque de Windsor, con ocasión de
conmemorar el natalicio del menor de sus hijos, ofrece un banquete en su
palacio y, como todos los años, la reina Ariana cuenta entre los principales
invitados.
Dentro de las
instrucciones para el éxito de la reunión, al chef Charles se le requiere que
el plato infaltable debe ser la ya famosa sopa
de setas.
Como era una ocasión especial,
Morgana decide agregar a su sopa rodajas de carne de cerdo ahumado, carne de
res y de gallina, verdura china, fideos rellenos, huevos de codorniz, pimienta,
jengibre y algunas especias francesas secretas.
La invitada principal queda tan
complacida con la sopa que pide repetir el plato, a la par que solicita al
duque que ordene la presencia de la autora de tan delicioso potaje para felicitarla.
Inmensa es la sorpresa de la reina
Ariana cuando tiene frente a frente a Morgana, su sobrina y legitima heredera
al trono de Arcador.
––No es posible que estéis viva. Mis
propios soldados vieron cómo te ahogabas cuando fuisteis arrojada al río
—expresa indignada la reina Ariana.
––El dije mágico, que llevo atado al
cuello y que me lo obsequió el Centauro, me salvó la vida al mantenerme a flote
sobre las aguas —responde Morgana con gravedad—. Ahora te quedan pocos segundos
de vida, la sopa de setas para ti tenía
una pócima secreta. Te
convertirás en una estatua de sal para toda la vida. Así pagarás todas las maldades e injusticias que
has cometido con mi familia.
Morgana de inmediato parte al reino
de Arcador, donde reina con tino y justicia y cuenta con el respaldo de sus
súbditos. En su corte se mantiene el día de la sopa de setas y ella misma sigue
yendo a los bosques para recolectar los consabidos hongos. También se dice que
en esos lugares conversa con un Centauro y que cuando regresa se le ve radiante
y feliz. ¿Será el Centauro su amigo, novio o amante? Solo ellos lo saben.
Mientras,
en el castillo de Windsor se exhibe a Ariana, convertida en una estatua de sal.
¡Buen relato Belisario! ¡Felicitaciones!
ResponderBorrarMagnifico Belisario.Felicito de nuevo te leo.
ResponderBorrarBuenísimo!
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