Clide Gremiger
Argentina
Sentada
frente a mí en la sala de espera de la ginecóloga, así la vi. Ella me sonrió y
al comienzo supuse que era por pura amabilidad, hasta que relacioné esa sonrisa
con el pasado y se me dibujó Nora en el recuerdo. Resultaba difícil reconocer a
la sensual Nora en una cara con más colores que adorno de carnaval y una cabeza
con hilachas de tinte zanahoria. En su boca, pintada y repintada con
dedicación, asomaban, con cada sonrisa, unos incisivos de diferente coloración.
"Tiene que cambiar de dentista", fue lo que pensé, en el mismo
momento que percibí la agitación en su barriga de pelota desinflada.
La
voz de la ginecóloga sonó con un "Vilchez" y Nora se levantó,
respondiendo al llamado, no sin antes lanzarme con voz casi jocosa: estás re
vieja y achacada pero te reconocí de inmediato. Me dio gusto verte.
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¡Un remate bien a lo Clide!
ResponderBorrar¡Me encantó!
Chas gracias Osvaldo! Abrazo!
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